lunes, 15 de junio de 2009

SONETO No. 1

Hazme la muerte, no quiero una muerte
de tierra ni de fuego, necesito
una muerte de aire donde haya un grito
seco, de ahorcado por dos manos fuertes.

Hazme la muerte, que sea una muerte
de aguja aguda, de acero pulido
que alcance todos mis huesos raídos,
mis sueños, en un delirio latente.

Bríndame una muerte de gas mostaza,
asfixiante, muerte que dure más,
de una agonía constante que roce

cuerdas bucales oprimidas, para
que lentamente logre articular
cada una de las letras de tu nombre.

(de la serie 11 endecasílabos ibéricos)

ALEJANDRO URANGA
Madrid
abril de 2009

1 comentario:

  1. leer hazme la muerte, fue para mi un simíl de hazme el amor, de esa entrega loca y delirante entre amantes que culmina, al dejar que el otro me haga la muerte.

    Sin duda el climax es gritar "tu nombre"

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